Acusan sobornos en Pemex en #Chicontepec por parte de petrolera texana

Soslayada por la autoridad la evidente responsabilidad de Pemex en el negro expediente de Oceanografía, en un intento de no contaminar el ambiente en la antesala de la puesta en escena de la reforma energética ni irritar al panismo con la exhibición obscena de trapitos al sol, ya estalló otro escándalo: la feria de decibeles, como en la mayoría de los casos de corrupción con cargo a empresas públicas, se generó en Estados Unidos.

Estamos hablando de la entrega de presuntos sobornos a la aún empresa paraestatal por parte de la petrolera texana Key Energy Services.

La acusación se sustenta en la Foreign Corrupt Practices Act, que prohíbe a las firmas del país de las barras y las estrellas recurrir a prácticas ilícitas para obtener contratos.

Empero, dicha compañía obtuvo contratos por cuatro mil 600 millones de pesos por parte de Pemex Exploración y Producción, la mayoría por adquisición directa, es decir, sin licitación internacional de por medio.

Estos se pactaron en 2008, pero su vigencia se agotaba hasta 2013.

El primero fue por mil 55 millones 70 mil pesos para “estimular” la producción de la región del norte del campo de Chicontepec, ubicado en Veracruz y parte de Tamaulipas, una de las vetas en tierra firme de Petróleos Mexicanos, descubierta hace más de 80 años.

Posteriormente habría un segundo contrato para la misma zona por mil 194 millones 399 mil pesos.

Adicionalmente, aquí sí bajo una licitación previa, hubo dos contratos más para el mantenimiento de pozos en Poza Rica y Altamira, Tamaulipas, por 727 millones 81 mil 890 millones de pesos, con la novedad de que estos se alargaron por dos años más sin que se diera razón alguna.

El contrato más oneroso que se otorgó, otra vez por adquisición directa, apuntó nuevamente al mantenimiento de pozos de la región norte de Chicontepec.

Su monto alcanzó mil 679 millones 349 mil pesos, con la novedad de que originalmente estaba pactado en 563 millones 158 mil pesos, con vigencia hasta 2008.

El caso es que otra vez sin explicación alguna, por más que lo abrupto del terreno obliga a trabajar en circunstancias difíciles, se firmaron tres convenios de extensión entre enero y noviembre de 2009… en los que se triplicó el precio.

Indagatorias

La especialidad del Key Energy es la perforación de pozos en zonas desérticas.

El común denominador en todos los contratos, al margen de la presencia como director general de la aún empresa pública hasta 2012 de Juan José Suarez Coppel, es la firma en los documentos del hasta hace unos meses director de Pemex Exploración y Producción, Carlos Morales Gil.

Al impacto del nuevo escándalo, a cuatro meses de que estallara el de Oceanografía a denuncia del segundo banco más importante del país, Pemex anunció que estaba investigando la justeza de facturas entregadas por la contratista por un monto de 372 millones de dólares, es decir, el total de los contratos.

El problema es que si no se apura le pueda ganar la conclusión de la indagación la autoridad de Estados Unidos.

A querer o no, con los ojos de los inversionistas internacionales colocados en la renta petrolera del país, a Pemex le persigue el escándalo.

Por lo pronto, en la misma ruta, Key Energy Services ha iniciado su propia investigación interna con un comité independiente.

Otra raya al tigre; o si lo prefiere, un capítulo más del libro de la ignominia.