Una vecina de la comunidad Los Cerritos, perteneciente a este municipio, identificada como Paula Soler Alonso, asegura que a punto estuvo de morir porque le hicieron brujería y hasta aseguró que le sacaron tres “culebritas” que aún conserva en un frasco desde la semana pasada, y están vivas.
La mujer domiciliada en calle Ignacio Zaragoza número 7 de la comunidad antes mencionada, relató en exclusiva al reportero al que pidió se publicara su caso para alertar a la población a cuidarse y debido al impacto de este medio de comunicación, que los hechos se dan desde el 12 de agosto pasado cuando ella comenzó a sentir fuertes dolores abdominales.
Asegura doña Paula que acudió con médicos especialistas de Minatitlán y Acayucan, quienes le recetaron diversos medicamentos pero nada mitigaba el dolor. Cuando se le terminó el dinero y el problema empeoró, su familia tuvo que pedir ayuda económica a la población debido a que la iban a internar en un hospital de Minatitlán.
Fue el miércoles de la semana pasada, cuando muchas personas acudieron a apoyarla económicamente para que acudiera nuevamente con el médico, pues los dolores eran insoportables, asegura que se revolcaba de dolor en su cama.
En ese momento apareció una señora a la que dice no conocer, se abrió paso entre los que allí se encontraban y dijo que le dieran espacio y solo le dio a tomar un poco de agua con hojas de albahaca cuando ella ya estaba semi-inconsciente y fue cundo extrañamente sacó los animales a los que ella llama culebritas; esto ante la presencia de varias personas que habían ido a visitarla; curiosamente en ese momento desaparecieron los dolores y a la fecha su salud se ha ido recuperando.
Según la propia creencia de la dama que asegura haber tenido que abandonar su trabajo en un restaurante de Minatitlán, debido al mismo malestar, gente que quiere verla muerta para apoderarse de un terreno de su propiedad, le hicieron “maldad” y le dieron una comida “curada”; era un plato de mole, dice.
Agregó que lo que ella quiere es alertar a la población a tener cuidado con lo que le regalan, sobre todo si se trata de comida, “pues la maldad existe”, asegura doña Paula Soler.
