Autoridades mexicanas descubrieron fosas clandestinas en el estado de Veracruz de la que han sido exhumados seis cadáveres, una cifra que podría aumentar en los siguientes días, informó el lunes el fiscal regional, Jorge Winckler.
“Se han encontrado seis cuerpos pero nos dieron positivos [análisis de tierra en] otros puntos” de la misma área de tumbas ilegales cavadas en el municipio de Río Blanco, en Veracruz, en el este de México, dijo Winckler en conferencia de prensa.
El hallazgo fue producto de las búsquedas que familiares de personas desaparecidas realizan en coordinación con autoridades.
“Se seguirá buscando para rescatar los demás cadáveres”, comentó a su vez Araceli Salcedo, presidenta del colectivo Familias de Desaparecidos en Orizaba-Córdoba.
Una de las técnicas de análisis de la tierra consiste en clavar largos tubos de metal para detectar olores putrefactos.
Las fosas fueron encontradas hace una semana en la cima de un cerro de unos 400 metros de altura.
En febrero del 2018 fueron detenidos varios elementos de la policía de Veracruz, acusados de haber hecho desaparecer a docenas de personas. De acuerdo con las investigaciones, los uniformados asesinaron a varios de sus secuestrados y los lanzaron a una barranca conocida como La Aurora, ubicada a unos 400 kilómetros de la Ciudad de México.
Salcedo explicó que desde hace varios meses hacen rastreos en esa zona. Ella busca a su hija Fernanda Rubí Salcedo Jiménez, desaparecida en Veracruz en septiembre del 2012.
Según el gobierno mexicano, se ha localizado en la última década más de mil 100 fosas clandestinas y hay alrededor de 26 mil cuerpos sin identificar en servicios forenses.
Según cifras oficiales, en México hay más de 40 mil personas reportadas como desaparecidas, delito que recrudeció en medio de la ola de violencia que desató la guerra contra el narcotráfico iniciada en 2006.
En estados como Chihuahua, Durango y Veracruz se han localizado fosas clandestinas masivas con cerca de 200 cadáveres.
Los narcotraficantes también suelen deshacerse de sus víctimas enterrándolos en zonas de difícil acceso.
