La CEAPP deja a su suerte a los familiares de Cándido Ríos

El fin de semana, por pretender entrevistar a Jorge Wickler Ortíz, fiscal General del Estado de Veracruz, el enlace de prensa, Conrado Hernández Ortiz, ejecutó un bloqueo absoluto en contra de una servidora. Me eliminó del grupo de WhatsApp de la FGE y además, también de su mensajería personal. Todo obviamente por órdenes de titular de la dependencia a quien se le intentó contactar vía telefónica para realizarle una entrevista exclusiva y que de manera reiterada, cancelaba la llamada.

Pero lo más alarmante es que el impedimento informativo ha trascendido hasta la Comisión Estatal para Atención y Protección de los Periodistas (CEAPP) por parte de Jorge Morales Vázquez, secretario ejecutivo y la presidenta del elefante blanco, Ana Laura Pérez Mendoza, quienes instauraron un bloqueo en acuerdo entre ellos, en contra del portal de noticias AGN Veracruz, luego de que se le solicitó el número de telefonía celular de la señora Hilda Nieves Martínez, viuda de Cándido Ríos Vázquez, periodista asesinado en el municipio de Hueyapan de Ocampo perteneciente al estado de Veracruz, luego de que la misma señora presidenta de esa comisión aceptó vía mensajería de WhatsApp que mantenían contacto con ella y además también “medidas de protección” en favor de la viuda y sus hijos, luego del asesinato del periodista en Hueyapan de Ocampo.

Todo esto surgió por la entrevista en el espacio informativo de Ciro Gómez Leyva, que le realizaron al subdirector editorial del Diario de Acayucan, Cecilio Pérez dijo que la familia del periodista asesinado, no está recibiendo protección de parte de la CEAPP. El comunicador también manifestó que no se tiene ningún reporte de las investigaciones por parte de la FGE y que realizaría contacto con los integrantes de la comisión para conocer los detalles de la misma.

Por su parte la señora presidenta de la CEAPP, Ana Laura Pérez Mendoza por mensajería privada a AGN Veracruz, dijo:

“Las familias nos manifiestan, en primera instancia que no se sienten en riesgo pero aun así se tienen medidas de protección y estamos en constante comunicación. Una vez que tengan tiempo de procesar lo sucedido, volveremos para ver lo procedente” dijo la presidenta de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas.

Pérez Mendoza, un tanto más “mesurada” pero al final alfil de la FGE, al solicitarle el número de telefonía celular de la señora Hilda Nieves Martínez, me indicó estar imposibilitada de proporcionar el número personal de la viuda del colega, por lo que se le solicitó que contactara con la señora para que autorizara que me compartiera dicha información. Su respuesta:

“Es un dato personal y yo no estoy autorizada por la señora para darlo (…) Espero lo comprendas (…) No tanto, demoledor la avalancha de cosas que para la familia conlleva. Desgastante. Hay un tema de salud (...) Lo siento y buenos días" concluyó y luego me indicó que si quería el dato se lo pidiera a Morales Vázquez.

Desafortunadamente el secretario ejecutivo de la CEAPP, Jorge Morales Vázquez, fue más violento y actuando agresivo en su respuesta –actitud constante en contra de los periodistas que no ha podido controlar, sobre todo en contra de AGN Veracruz y a una servidora- expuso groseramente:

“Tu papel de periodista es conseguir el num (…) Todo lo quieres fácil (…) Cuando hacía periodismo no trabajaba desde el escritorio (…) Perdóname pero estoy ocupadl”.

Jorge Morales Vázquez, pese a que su principal función dentro de la CEAPP es brindar protección a los periodistas, en su desarrollo como secretario ejecutivo; el “poder” solo le ha servido para beneficiarse económicamente y distribuir dádivas en un determinado grupo de periodistas que sirven de alfiles para instaurar a través de ellos, una agresiones y desacreditaciones al ejercicio periodístico que no converge con el oficialismo que ellos mantienen. De manera constante, Jorge Morales, no se limita y su cinismo y agresiones las eleva, pero no le preocupa las denuncias públicas de muchos colegas en su contra, pues se sabe “poderoso” y protegido del gobernador del estado, Miguel Ángel Yunes Linares, a quien le sirve fielmente.

Quienes nos dedicamos al periodismo en Veracruz –ejercicio que muchos llaman crítico, pero es periodismo realmente y no “boletineros” incrustados a las dependencias públicas- han tenido que padecer la censura informativa y agresiones de parte de los servidores públicos a falta de garantías de protección por parte de la CEAPP, la cual es, en la actualidad, se ha unido y es la primera en ejecutar acciones verbales hostiles en contra del periodismo veracruzano.

La señora Hilda Nieves Martínez en diversas entrevistas en diferentes medios de comunicación en el estado, ha denunciado sentirse vulnerable por el asesinato de su esposo. Indicó en una entrevista a Imagen del Golfo con fecha del 23 de agosto del 2017, que Cándido Ríos Vázquez había sido golpeado dos meses antes, por parte del comandante de la Policía en la congregación El Calabozo.

“¿Por qué lo golpearon? Se le preguntó mientras en el centro de su casa de la calle 20 de Noviembre de la congregación de Soconusco, era velado el cuerpo de su esposo. “Por mandato de Gaspar”, dijo entre llantos, secundada por su hija, Cristina, una de las dos que tuvo el matrimonio” El sujeto sigue libre porque tanto gobierno federal como estatal y la misma CEAPP lo protegen.

Mientras tanto, también Roberto Campa Cifrián, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación a cargo de Miguel Ángel Osorio Chong –íntimo amigo del gobernador del estado de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares- el asesinato de Cándido Ríos Vázquez no está relacionada con su actividad periodística. La esposa, la viuda del colega, señala directamente a Gaspar Gómez Jiménez, ex alcalde de Hueyacan de Ocampo, quien también, en un video colgado a la red social de You Tube, amenazó al periodista públicamente. Sujeto que al parecer nadie está investigando por ser el principal sospechoso del asesinato del periodista.

En el espacio informativo de Libertad bajo Palabra, bajo la pluma de Armando Ortiz, expone que a Germán Gómez Jiménez en el período del 2000 al 2004 se le acusó de la desaparición en el 2001 del regidor perredista Leovigildo Ciau Medina y cabe señalar que dicha vinculación tanto de su desaparición y el asesinato –encontrado muerto el 11 de octubre del 2002- fue expuesta por el hoy finado, Cándido Ríos Vázquez en reiteradas publicaciones. Al parecer, motivos y muchos tenía el hoy ex alcalde en contra de hoy finado.

“Según los mismos reportes periodísticos a Gaspar Gómez Jiménez, ex alcalde de Hueyapan en el período del 2000 al 2004 se le acusó de la desaparición del regidor de Leovigildo Ciau, quien era su principal detractor. Quizá por ello Cándido Ríos acusaba que Gómez Jiménez, “El Psicópata” de desaparecer gente y las autoridades no le hacían nada. El medio informativo La Silla Rota señala que “Cándido Ríos Vázquez contaba con 12 averiguaciones previas por amenazas y agresiones en su contra, ligadas directamente con el ex alcalde de Hueyapan de Ocampo, Gaspar Gómez Jiménez” http://libertadbajopalabra.com/2017/08/24/gaspar-gomez-jimenez-quien-agrediera-candido-rios-historias-crimen-poder-2/

En el Reforma se lee:

“A Casi un año del secuestro del regidor del PRD en Hueyapan de Ocampo, Leovigildo Ciau Medina, fue encontrado su cadáver, informó ayer en un comunicado la Procuraduría General de Justicia del estado (…) La Procuraduría no especificó el lugar del hallazgo, asimismo, no descarta el móvil político y una de las vertientes de la investigación que mantiene abierta es la que apunta hacia el Alcalde del PRI, Gaspar Gómez Jiménez, a quien consideran como el presunto autor intelectual del homicidio.

El profesor Ciau Medina fue secuestrado el 10 de diciembre del 2001 al salir de la escuela primaria donde trabajaba (…) Gaspar Gómez Jiménez, presidente municipal de Hueyapan de Ocampo, ganó la Alcaldía a través de una alianza con el PRD, cuando el profesor Leovigildo Ciau declinó a su favor en los comicios municipales del 2000; sin embargo, con el tiempo, el regidor perredista se convirtió en su principal crítico y opositor” https://reforma.vlex.com.mx/vid/hallan-veracruz-cuerpo-regidor-81898021

Desafortunadamente la CEAPP no usa la tecnología para documentar los asesinatos y las evidencias. Según Jorge Morales Vázquez, no hace “trabajo de escritorio”. Evidentemente no lo hace, pues sólo así podría documentar todas las denuncias que Cándido Ríos Vázquez interpuso y que hizo ante la FEADLE, dependencia regulada por la Secretaría de Gobernación y por ello, fue la causa por lo que lo integraron al Mecanismo de Protección. Pero ni para Ana Laura Pérez Mendoza, ni para el secretario ejecutivo del elefante blanco, la familia del periodista merece ser atendida por parte de la CEAPP. Cuesta dinero, dinero que tal vez está sirviendo para un alfil periodista o para darse la vida de gloria que jamás habían soñado tener este par, máxima autoridad en dicha dependencia pública. Pues eso es lo que és.

Morales Vázquez menosprecia la actividad periodística en Veracruz y más si esta la realiza una mujer periodista. Constantemente ha acusado a una servidora de no tener la capacidad ni la preparación que él mantiene. Constantemente menosprecia la pluma, y se pone de ejemplo, pues advierte que cuando él fue reportero, hacía periodismo y no lo que ejercemos actualmente quienes nos atrevemos a criticarlo.

Ana Laura Pérez Mendoza, no ha sido mejor en su conducta. Pese a querer ser “amiga” y “compañera”, siempre se ha concentrado en hacer fuerte las malas decisiones del secretario ejecutivo. Le aplaude y se hinca ante él. Ambos, son los principales agresores y violentan la actividad periodística que no han podido “maicear”. Siempre canalizando sus esfuerzos para proteger a Jorge Winckler Ortiz, fiscal General del Estado y al gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, quién fue el que los enquistó en la CEAPP.

¿Para qué piden que les mantengan el presupuesto? ¿Para continuar dándose la vida de reyes que hasta ahora han mantenido? A una servidora le han negado la asistencia jurídica, porque al señor Jorge Morales Vázquez no le ha dado la gana de que se haga. Violentando, amenazando y demeritando verbalmente el trabajo periodístico que mantiene un reducido grupo de colegas. Su conducta es tan parecida a la que aplicó el hoy preso del Penal del Norte, Javier Duarte de Ochoa, a quien tanto criticaba.

Mientras tanto, Yunes Linares, el asesinato del Cándido Ríos, no ha merecido ni un comentario suyo. No le ve el caso, teniendo a una CEAPP doblegada e hincada a sus pies. Seguro le mantendrá el presupuesto millonario, han sido muy buenos “muchachos” y merecen continuar disfrutando del erario.