Libertad sin libertinaje

2018-06-07

¿Tenemos libertad de expresión los mexicanos? Es lo primero que viene a mi mente en un día como hoy 7 de junio, que se celebra la Libertad de Expresión en nuestro país.

Dicen que por principio debe uno analizarse, así que desde mi punto de vista puedo decir que sí. Hasta este día he tenido la libertad de decir y escribir lo que pienso. He podido asociarme y reunirme con quien yo quiera, creer en lo que quiera (aunque algunos traten de cambiarme) y hasta participar en la vida política del país desde mi trinchera.

Recordemos que la libertad de expresión es un derecho fundamental de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y lo estipula el artículo 19 que dice: “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y de recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.”

Aclaro también que he tratado de que mi expresión no lastime, intimide o haga sentir mal a terceras personas. Es decir, no considero solamente tener el derecho de expresarme, sino también la obligación de no dañar a los demás. ¿Por qué lo digo? Porque actualmente estamos acostumbrados a denostar, agregar calificativos u ofensas al expresar nuestra opinión de alguien. Sin embargo es completamente respetable.

Mucho se dice que actualmente está coartada nuestra libertad, sin embargo basta darse una vuelta por las redes sociales y ver que hasta le mientan la madre a todo el que pueden. Y el objetivo preferido es el Presidente. ¿A poco no hay libertad de expresión?

Tema aparte merecen los periodistas que hacen trabajos de investigación, los que ponen en jaque al gobierno, y los que documentan a los cárteles en el país. Ellos sí son muchas veces intimidados, amenazados, levantados, desaparecidos y asesinados. Recientemente leía un tuit de Arturo Ángel, periodista de Animal Político que a raíz de su investigación de las empresas fantasma en Veracruz, ya no le permitieron el acceso al WTC en la ciudad de México ni a él ni a la periodista Valeria Durán.

Aunque déjeme comentarle que muchas, muchísimas veces la libertad del periodista se ve coartada por sus mismas casas editoriales; ellas son las que ejercen esas acciones de represión, con la no publicación de la noticia o en el mayor de los casos, con el despido del periodista ¡claro! Por petición de “alguien” del propio sistema gubernamental o del crimen organizado.

México es considerado uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, incluso desde el año 2000 por desgracia se contabilizan 116 comunicadores asesinados en nuestro país, según datos de la Organización Artículo 19, quien también ha contabilizado 507 agresiones entre ataques a medios de comunicación, desaparición forzada, privación de la libertad, ataques físicos o materiales, pero principalmente amenazas e intimidación.

Este día, debemos considerarlo como reflexión pues la lucha por la libertad de expresión es una tarea de todos, no solamente de los periodistas y del gobierno, y no solamente de un día, es un ejercicio que debemos realizar todos los días, ¡ah! pero de manera responsable, pues muchas veces esa libertad que tanto ansiamos se llega a convertir en libertinaje principalmente en las redes sociales donde se nos hace tan fácil adjetivizar sin un sustento o sin argumento.