Alito secuestra al PRI 

Para cerrar con broche de oro padecen el síndrome de Es-el-colmo  

JAVIER ROLDÁN DÁVILA

La insoslayable brevedad

2022-06-16

Después de sostener una reunión con varios ex presidentes del PRI, como son Manlio Fabio Beltrones, Beatriz Paredes, Roberto Madrazo, entre otros, y el senador Miguel Ángel Osorio Chong, su ex padrino y hombre fuerte del peñato, el tristemente célebre, Alejandro Moreno Cárdenas, de acuerdo a trascendido político, resumió todo con un ¡me la pelaron! 


En efecto, el campechano les dijo que sí a cada petición (que en realidad no significa nada), pero cuando tocaron el tema de su renuncia la respuesta fue un NO rotundo, afirmó que concluirá el periodo para el que fue elegido, mismo que termina en agosto de 2023. 


Con el control del Consejo Político, los sectores, los CDE y la mayoría de los diputados federales, el impresentable personaje está blindado y como ya dijimos antes, la urbanidad política no es lo suyo, por lo que un retiro por su ilegitimidad, no lo contempla. 


Desde luego, aunque no es un estadista tiene instinto de sobrevivencia y sabe que, al dejar el CEN, quedaría a merced de las imputaciones que la Fiscalía de Campeche le va a enderezar, su fuero sólo le sirve hasta agosto de 2024, si es que no se lo quitan antes. 


Por lo tanto, como dirigente nacional, todavía puede operar con su grupo compacto en San Lázaro y vender, si es que en la 4T se lo quieren comprar, su eventual apoyo a las dos reformas constitucionales que le interesan al presidente López Obrador, desde luego, a cambio del sobreseimiento de las presunciones. 


Así pues, Alito se aferrará al puesto porque es su tablita de salvación, sin el mismo, su rebaño legislativo le daría la espalda, claro está, que esto podría ocurrir si hay una rebelión en el grupo parlamentario, pero, al menos, hasta el momento, no se vislumbra. 


Ni hablar, el Nuevo PRI, más que los neo cachorros de la revolución, son una parvada de cuervos. Si no supieron predecir a sus elegidos, mucho menos las exigencias sociales.