LOS POLOS BAJAN, EL MAR SUBE.

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Fernando Padilla Farfán

LA ESCRITURA

2023-10-13

El deshielo de los polos de la Tierra es un fenómeno que ha estado ocurriendo durante las últimas décadas como resultado del cambio climático, causado principalmente por la actividad humana.


Los dos polos, el Polo Norte en el Ártico y el Polo Sur en la Antártida, están experimentando un aumento en la temperatura promedio, lo que ha llevado a la fusión de los glaciares y la disminución del hielo marino. Algunos de los principales factores que contribuyen al deshielo de los polos es el aumento de las temperaturas globales.


El calentamiento global debido a la emisión de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono (CO2) y el metano (CH4), ha llevado a un aumento en la temperatura promedio de la Tierra. Esto provoca un aumento de las temperaturas en los polos, lo que resulta en la fusión del hielo.


Si el nivel del mar continúa aumentando debido al deshielo de los polos y al calentamiento global, se producirán una serie de impactos significativos y preocupantes en todo el mundo. Algunas de las principales consecuencias serían las Inundaciones costeras.


El incremento del nivel del mar aumenta el riesgo de inundaciones en las áreas que están a nivel del mar. Las áreas bajas y las ciudades costeras son particularmente vulnerables. Las inundaciones pueden causar daños materiales, desplazamiento de personas y pérdida de vidas.


A medida que el nivel del mar sube, se pueden perder carreteras, aeropuertos, astilleros, zonas portuarias; que estén a nivel del mar. Esto afecta a los cultivos y a las comunidades que viven en esas áreas. Por los cambios en la temperatura del mar, podrían desaparecer especies marinas. También resultarían afectadas las islas pequeñas que se encuentren en cualquier lugar del mundo.


El aumento del nivel del mar puede provocar la intrusión de agua salada en acuíferos subterráneos y sistemas de agua dulce costeros. Esto puede contaminar fuentes de agua potable y afectar la agricultura.


Las infraestructuras costeras como los muelles, pueden verse dañadas por el aumento del nivel del mar y las inundaciones. La reparación y el reemplazo de estas infraestructuras pueden ser costosos.


Los humedales, manglares y arrecifes de coral son ecosistemas costeros que pueden verse afectados por el aumento del nivel del mar. La pérdida de estos ecosistemas tiene consecuencias negativas para la biodiversidad y la protección contra tormentas.


Las áreas agrícolas costeras pueden sufrir daños debido a la intrusión de agua salada y las inundaciones, lo que puede afectar la producción de alimentos.


El aumento del nivel del mar puede influir en los patrones climáticos y la circulación oceánica, lo que podría tener impactos globales en el clima.


El aumento del nivel del mar también puede plantear riesgos para la seguridad nacional, ya que podría agravar los conflictos relacionados con la escasez de recursos y el desplazamiento de población.


Para abordar estos desafíos, es crucial tomar medidas para mitigar el cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, se deben implementar estrategias de adaptación que incluyan la construcción de infraestructuras resistentes al aumento del nivel del mar, la planificación de la gestión costera y la protección de los ecosistemas costeros. La cooperación internacional también es esencial para abordar los impactos globales del aumento del nivel del mar.


El aumento en los niveles del agua de mar, impediría que los ríos descarguen sus aguas lo que causaría inundaciones severas.


#fernandopadillafarfan