Erick Lagos y COFISUR; la amenaza del Yuribia y los eventos con foto pa´ los cuates

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Mientras Erick Lagos tomaba parte de una reunión para evaluar la seguridad en Veracruz y Tabasco, desde la sede militar en Minatitlán, un grupo de afectados por el fraude en COFISUR bloqueaban el centro de Xalapa.

El Secretario de Gobierno de Veracruz se habrá enterado, al momento de dialogar con su homólogo tabasqueño César Raúl Ojeda Zubieta, que los defraudados por COFISUR –una financiera irregular cuya quiebra ha provocado muertes de socios- amenazaban con bloquear la presa Yuribia.

Tal amenaza no es tema nuevo: se ha vuelto asunto común que maestros, ejidatarios, agrupaciones indígenas, dejen sin suministro de agua a Cosoleacaque, Minatitlán y Coatzacoalcos.

La situación se ha convertido en algo tan normal y fuera de control que en Coatzacoalcos –por ejemplo- se aprobó la inversión de 50 millones de pesos para la creación de pozos que garanticen el servicio de agua potable al municipio, al margen del Yuribia.

Es más: todo mundo se hace “que la virgen le habla” –me refiero a empresarios y funcionarios- cuando se aborda el tema del Yuribia desde una perspectiva distinta a la estrictamente política: la Presa cada día cuenta con menos agua porque la sierra de Soteapan está deforestada y los afluentes que la nutren han disminuido su caudal histórico.

Pero en fin, volviendo a la coincidencia entre una reunión que presidió el gobernador Javier Duarte de Ochoa en la 29 Zona Militar de Minatitlán -y en la que Erick Lagos tomó parte junto a su colega de Tabasco- vale la pena preguntarse si César Raúl Ojeda Zubieta ocupa buena parte de su tiempo laboral en estructurar un proyecto que lo conduzca a la próxima Legislatura Federal, en lugar de ocuparse –al 100 %- en los temas que competen a su cargo público.

Porque este es, lamentablemente, el caso del Secretario de Gobierno de Veracruz.

¿Por qué los defraudados de COFISUR deben viajar hasta Xalapa, bloquear el centro de la capital y lanzar amenazas de dejar sin agua a la región para llamar la atención y ser atendidos por instancias oficiales que debieran dar seguimiento a su problemática en forma eficaz, oportuna y en el sitio mismo donde ha ocurrido; es decir en Coatzacoalcos?

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Podrán decir los colaboradores y simpatizantes de afanes políticos de Erick Lagos, que lo de COFISUR es una manera de poner obstáculos al nativo de Ciudad Isla.

Ante tal argumento, hay que puntualizar que en las Secretarías estatales de Educación, de Desarrollo Agropecuario, de Desarrollo Social, así como en la fracción perredista del Congreso Local, la mano del Secretario de Gobierno está muy presente.

A Erick se le siente en acciones que van desde nombramientos, hasta apoyos a medios de comunicación familiares que cuidan muy bien su imagen.

Lagos es visto –y con razón, por tanto trabajo preelectoral- como un fuerte precandidato a la diputación federal por el distrito de Acayucan.

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Hay muchos temas que requieren atención urgente en el escenario político de Veracruz y del Sur jarocho en particular.

De todas las problemáticas, ubicadas desde el inseguro norte de Pueblo Viejo y Pánuco, hasta los sitios donde ser taxista es poner en riesgo la vida las 24 horas del día como en Cosoleacaque y Jáltipan, la agenda del Secretario de Gobierno debiera ocuparse con absoluta dedicación; en coordinación con el gabinete de seguridad en pleno.

Hay otros temas también de gran trascendencia, como los bloqueos carreteros que se anuncian con mucha anticipación de parte de diversos grupos inconformes y que afectan a la sociedad en general por no atenderse a tiempo.

¿Por qué descuidar estos rubros y acudir, preocuparse y ocuparse de manera enfática en sólo un distrito, en este caso el XX, de Acayucan?

¿Por qué dedicarse un fin de semana sí y otro también a entregar patrullas, ambulancias, acudir a eventos privados con alcaldes, alcaldesas, tomar parte personalmente hasta de reuniones de trascendencia menor como la de Notarios en una mini región?

Todo es importante, desde luego, pero… ¿Son éstos, temas que deben llenar la parte esencial de la agenda en una Secretaría de Gobierno?

¿No hay un desfase en tal agenda?

¿No estamos ante un descuido de lo más, por dedicar tiempo y recursos públicos a lo menos?

¿No es más importante vigilar, detalle a detalle, lo que ocurre en los 212 municipios veracruzanos en torno a la seguridad, la salud, la inconformidad social por asuntos como el aumento al pasaje, que encabezar actividades donde lo más valioso es tomarse la fotografía y salir en el periódico de los aliados?

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Si a Erick se le hace llegar a San Lázaro, ojalá cambie de agenda y eventualmente de asesores.