La polaca o lotería, tradición mexicana y altruismo de gran arraigo en Cosamaloapan

+Polaqueras agradecen apoyo de Tomás Carrillo

Zona Sur

Pablo Solano Tejeda - 2016-07-18

El juego de la polaca o lotería es uno de los juegos de mesa con gran tradición y de gran colorido de cartas o cartones y barajas con figuras representativas de nuestra flora y fauna, como el árbol, frutas como el melón y la sandía, aves como el pájaro y el cotorro, entre otras figuras como el pescado, la rana, el borracho, el valiente, el músico, la campana, el diablo, en fin todas ya conocidas por millones de mexicanos.

La polaca, mayormente conocida, se juega en las ferias, kermeses, casas, patios, vecindarios y en salones. Donde -por lo regular- los participantes, niños jóvenes y adultos, apuntan con piedritas, corcholatas, granos de maíz o frijol las barajas con figuras que un gritón va cantando con gracia y picardía. Y al completar la línea gritan “bola con rana” o con cualquier otra figura.

E independientemente de que es un juego de convivencia, entretenimiento y diversión. En Cosamaloapan hay grupos de mujeres que organizan juegos o manos de la polaca para apoyar alguna noble causa en bien de una institución educativa, algún enfermo de escasos recursos o una iglesia. Para lo cual sortean despensas, artículos del hogar, bolsos para damas u otros artículos.

Como en el caso de un grupo de mujeres se reúnen los días lunes y sábados a partir de las cinco y media de la tarde en la avenida Independencia en la casa de la señora Elena Flores. Quien dijo que llegan muchos familiares de personas enfermas pidiendo alguna ayuda. Y lo que se reúna de la polaca, se le entrega como apoyo.

Para lo cual también, a su vez, recurren a diversas instituciones y personas altruistas como en el caso del Maestro Tomás Carrillo Sánchez quien les hizo llegar unos tablones o mesas largas para jugar con mayor comodidad y algunos artículos. Lo cual agradecen profundamente.

Por su parte Carrillo Sánchez, manifestó que tiene la fortuna de contar todavía con sus padres, doña Yico Sánchez Domínguez y Tomás Carrillo Hernández, además de sus suegros. Por lo que regularmente visita Cosamaloapan.

Aparte de que tiene un compromiso moral con quienes han participado con él. Lo cual lo obliga a tener alguna atención con las personas que se le acerquen con alguna petición de apoyo. Y aunque no se puedan resolver todos los problemas. Los que llevan a cabo acciones en bien de los demás, encontrarán alguien solidario. Ya que en primer lugar quiere mucho a su tierra y en segundo, en Cosamaloapan están sus padres.

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