Cuitláhuac, entrega/recepción “bajo protesta”

Un Congreso listo para entablar juicio político contra el gobernador saliente Miguel Angel Yunes y su Fiscal General, Jorge Winkler, el rechazo a una Comisión Ciudadana, no contemplada en la ley, que vigile la entrega-recepción, y una previsible solicitud de licencia del mandatario saliente en los próximos días, forman parte de los escenarios previstos por el equipo de Cuitláhuac García a menos de cinco semanas de la transición.

Serán 20 despachos contables provenientes de México, 20 prestigiados abogados e igual número de auditores de la ASF los que habrán de penetrar la Secretaría de Finanzas para revisar las arcas públicas de cara a la venta de garaje, remate y concesión de propiedades y bienes públicos entregados a la familia y amigos de Yunes Linares en eternos comodatos.

Asimismo se exigirá rendición de cuentas por los dineros y propiedades quitados a los pillos del Duartismo que siguen en el limbo.

Todo ello ha complicado la entrega recepción.

Han transcurrido cuatro meses sin que el gobierno de Miguel Angel Yunes de muestra de diálogo, disposición alguna o cordialidad con el gobernador entrante y su equipo con quien no hay el mínimo contacto.

Yunes Linares solo se concretó a lacónicamente fijar un plazo máximo legal al primero de noviembre para poner contra la pared al gobierno de Cuitláhuac García que solo dispondrá de cuatro semanas para recibir un gobierno bajo sospecha.

Acaso por ello y ante la cerrazón y ausencia de cordialidad y cortesía política, se ha considerado que Cuitláhuac García tome posesión bajo protesta de ley, es decir, condicionando la entrega-recepción a posteriores auditorías.

En otro sentido pero sobre el mismo tenor, la PGR, a través de la SEIDO, se declara lista para dar a conocer la actualización de sus investigaciones contra el Secretario de Seguridad Pública, Jaime Téllez Marie, a quien se le señala por sus vínculos con los Zetas en temas de narcomenudeo y desaparición forzada.

Habrá que recordar que el jefe policiaco aceptó el pasado 26 de marzo que fue citado a declarar ante la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) por presuntos nexos con Guadalupe Hernández Hervis, “La Jefa”, operadora de Los Zetas, ligada a la banda de Hernán Martínez Zavaleta, el “Comandante H”.

Como parte de una indagatoria penal, la SEIDO intervino llamadas, con autorización judicial, y esto derivó en la comparecencia ante la federación de Téllez Marie.
La historia, sin embargo, ahí no terminó. Las indagaciones quedaron actualizadas para eventualmente proceder.

Dentro del equipo de Cuitláhuac García se mueve además la especie de que las Secretarías de Educación, Salud, Turismo y la de Infraestructura y Obra Pública, serían objeto de auditorías especiales por presunto manejo irregular de recursos públicos.

No hay claridad en el tema de las “aviadurías”; tampoco en el desvío de recursos destinados para la campaña de Miguel Angel Yunes Márquez, al igual que en la compra de insumos médicos y equipo de hospitales.

Tampoco se tiene claridad en la aplicación de recursos destinados a la llamada industria sin chimeneas que se tradujeron en nada.

Y por lo que toca a la entrega de obra pública a amigos y aliados, como fueron los casos del dirigente panista Pepe Mancha y el empresario Luis Palacios, no hay explicación que satisfaga.

El equipo de Cuitláhuac García se mueve por estos días en la discreción.
Espera que en cinco semanas arranque la transición sin haber recibido un solo contacto o la más mínima manifestación de cordialidad y deseos de encuentro entre equiperos.

Nadie se mueve.

Pero tampoco se busca la relación.

Bien sabido el desprecio y malquerencia que le guarda el gobernador Yunes Linares y su familia al gobernador electo Cuitláhuac García a quien no baja de “naco”.
El ganador, en la contraparte, ni suda ni se abochorna.

Sabe que cuenta con el total apoyo de los congresos estatal y federal, que en los próximos días podrían tomar acción adelantando juicio político para el gobernador saliente, de ahí la versión de que pediría licencia para enfrentar, sin fuero, eventuales demandas judicial.

Miguel tiene claro que Cuitláhuac no es enemigo pequeño, menos el otro ofendido, el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, quien guarda especial atención a tres adversarios Miguel Angel Yunes, Graco Ramírez y Miguel Angel Mancera.

Los expedientes de estos angelitos –uno de ellos es la famosa “Carpeta Azul”- los tiene sobre su escritorio para en su momento darles salida legal con el epitafio de
“¡Paz y amor!”.
Vaya que sorpresas que da la vida.

Tiempo al tiempo.